Los niños del desierto es un proyecto de extensión del Departamento de Artes Dramáticas de la UNA. Bajo la dirección de Sergio Sabater. Se presenta los días 4, 14, 21 y 28 de noviembre en el Teatro DelBorde, Chile 630, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Los niños del desierto
El desierto como sitio alegórico connotado por la ausencia de espiritualidad, de amor, de poesía, de piedad. Y en el desierto, las “cuevas de las manos” como intento del hombre primitivo de fijar una diferencia, de dejar una huella, de lanzar un legado a las generaciones futuras. La antorcha de la humanidad que pasa de mano en mano a través de los milenios; la estirpe humana que erige, pacientemente, incontables genealogías desde Adán, Caín y Abel. El laberinto inabarcable de los padres y los hijos que se pierde en los orígenes y la identidad que corre por las venas y a la vez se construye mecida por las palabras y los nombres, al calor de las historias de los pueblos y de las novelas de familia. Y como negación de la filiación y del amor, los niños del desierto, los niños apropiados, robados a sus padres y criados por enemigos: Moisés en el desierto del Sinaí y los pequeños cautivos del desierto argentino del siglo XIX, quienes presagian la tragedia del genocidio y del robo de niños en un desierto más cercano.
Porque somos humanos poseemos manos que lanzan mensajes hacia el futuro y a través de la descendencia nos proyectamos en nuestros hijos. Porque la estirpe humana concibe la identidad ligada al nombre, a la filiación, se suceden las genealogías y la procedencia y el linaje son parte consustancial del ser de las personas. Por eso los niños privados de su nombre y su identidad, los niños saqueados de su filiación y arrancados al amor de sus padres, son niños del desierto, niños de la intemperie, desguarnecidos por haber sido privados de su verdad.
Dramatis Personae
En los desiertos:
La vieja agorera: Patricia Carbonari
El padre ancestral: Pablo Garrido
La madre: Ana Rodríguez Arana
La hija: Sol Altare
Cabina escénica:
Voz 1: Sol Altare
Voz 2: Fede Flotta
Voz 3: Patricia Carbonari
Operación de video: Jairo Fiorotto
Asistencia técnica: Fede Flotta
Asistencia de producción: Marcelo Adra
Intervención plástica sobre cuero y diseño de programa: Álvaro Urzagasti
Música original y edición de sonido: Estanislao Galerato
Escenografía y vestuario: Laura Cardoso
Diseño lumínico y montaje de imágenes: Pehuén Stordeur
Dramaturgia: Ana Rodríguez Arana
Dirección: Sergio Sabater
Lugar
Teatro DelBorde
Chile 630. Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Reservas al 4300.6201
El desierto como sitio alegórico connotado por la ausencia de espiritualidad, de amor, de poesía, de piedad. Y en el desierto, las “cuevas de las manos” como intento del hombre primitivo de fijar una diferencia, de dejar una huella, de lanzar un legado a las generaciones futuras. La antorcha de la humanidad que pasa de mano en mano a través de los milenios; la estirpe humana que erige, pacientemente, incontables genealogías desde Adán, Caín y Abel. El laberinto inabarcable de los padres y los hijos que se pierde en los orígenes y la identidad que corre por las venas y a la vez se construye mecida por las palabras y los nombres, al calor de las historias de los pueblos y de las novelas de familia. Y como negación de la filiación y del amor, los niños del desierto, los niños apropiados, robados a sus padres y criados por enemigos: Moisés en el desierto del Sinaí y los pequeños cautivos del desierto argentino del siglo XIX, quienes presagian la tragedia del genocidio y del robo de niños en un desierto más cercano.
Porque somos humanos poseemos manos que lanzan mensajes hacia el futuro y a través de la descendencia nos proyectamos en nuestros hijos. Porque la estirpe humana concibe la identidad ligada al nombre, a la filiación, se suceden las genealogías y la procedencia y el linaje son parte consustancial del ser de las personas. Por eso los niños privados de su nombre y su identidad, los niños saqueados de su filiación y arrancados al amor de sus padres, son niños del desierto, niños de la intemperie, desguarnecidos por haber sido privados de su verdad.
Dramatis Personae
En los desiertos:
La vieja agorera: Patricia Carbonari
El padre ancestral: Pablo Garrido
La madre: Ana Rodríguez Arana
La hija: Sol Altare
Cabina escénica:
Voz 1: Sol Altare
Voz 2: Fede Flotta
Voz 3: Patricia Carbonari
Operación de video: Jairo Fiorotto
Asistencia técnica: Fede Flotta
Asistencia de producción: Marcelo Adra
Intervención plástica sobre cuero y diseño de programa: Álvaro Urzagasti
Música original y edición de sonido: Estanislao Galerato
Escenografía y vestuario: Laura Cardoso
Diseño lumínico y montaje de imágenes: Pehuén Stordeur
Dramaturgia: Ana Rodríguez Arana
Dirección: Sergio Sabater
Lugar
Teatro DelBorde
Chile 630. Ciudad Autónoma de Buenos Aires
Reservas al 4300.6201